Dejé de reemplazarte en cada cosa que hago. Dejé de pensar en que me muero porque alguien me diga que me olvide de que alguna vez exististe en la única parte de mi cabeza que llegó a pensarte, aunque solo todo esto sea producto de tu mal recuerdo. De mi corazón solo te amó mi hipotálamo, así que nunca te atrevas a decir, a repetir, pronunciar siquiera que te amé con TODO mi corazón. Esas etapas en las que pensé que no viviría sin verte un día, esas facetas estúpidas, histéricas, hasta irónicas, en mi ya no existen. Alguna vez te habrá importado lo que yo necesitaba, deseaba de todo lo que tuvimos?. No voy a comprarme nunca más a alguien como vos, por eso, hoy te digo que te olvido. Por más de que me afecte la superficialidad & pienses que mi mente no está del todo sana, no me voy a romper. No me interesan esos juegos abstractos de tu mente compadeciéndose de la mía. Que raro sería eso. Vos llorando de pena, una pena mortal, solo por mí. Jamás pude derramar una lágrima por vos, ni siquiera cuando acepté que no eras lo que buscaba. O cuando te vi diciéndome, cuando sentí, esa ruptura tan inexacta. Pero ya no pasan minutos con vos, puedo decir que tengo un receso de tiempo libre. No fuiste para nada lo que siempre quise. No me contaste ningún cuento que no supiera. No me cantaste ninguna canción llena de palabras que combinan porque ya las sabía todas. No se que hago meditando, no se que hago suponiendo que es lindo acordarme de todo. Pero creo que es porque muy dentro mío, aún no estoy pensando en olvidarme de vos.
Ya no vayas a buscar un lugar cerca de mi cama. Ni de mi abrupta imaginación. Estás fuera, tan afuera que te quiero adentro.